martes, 1 de mayo de 2012

Celebración "Ntra. Sra. de Luján"



Símbolos: Imagen de la Virgen de Luján, bandera argentina, una vasija con tierra, una carreta.

Frase: “MARÍA DE LUJÁN, MADRE DEL PUEBLO ARGENTINO”.

Ambientación: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Con un corazón agradecido, celebramos el don de la Virgen de Luján, patrona de nuestro pueblo argentino. Ya que el Señor, el Dios altísimo, la ha bendecido más que a todas las mujeres de la tierra.

(Mientras se canta, entra la imagen de la Virgen y la colocan en un lugar destacado, con flores y velas también la carreta o algo que la simbolice)

Canto: Hoy te quiero cantar

Hoy te quiero cantar, hoy te quiero rezar, Madre mía del cielo. Sí en mi alma hay dolor, busco apoyo en tu amor, y hallo en ti mi consuelo.

Hoy te quiero cantar, hoy te quiero rezar, mi plegaria es canción. Yo te quiero  ofrecer lo más bello y mejor, que hay en mi corazón. (bis)

Porque tienes a Dios, porque tienes a Dios, Madre todo lo puedes, soy tu hijo también, soy tu hijo también, y por eso me quieres.

Dios te quiso elegir, Dios te quiso elegir, como puente y camino, que une al hombre con Dios, que une al hombre con Dios, en abrazo divino.

(Música suave de fondo)

La sabiduría Divina se valió de la sencillez de un humilde esclavo llamado Manuel, para propagar las maravillas de nuestra Madre de Luján, que quiso quedarse en nuestras tierras, mostrando claramente su voluntad, ella buscó en Manuel a su amado servidor, que se caracterizaba por ser trabajador, alegre y  bueno.

(Presentamos una vasija con tierra y la bandera).

Virgencita de Luján, andadora de caminos,
Danos la humildad del negrito Manuel,
Danos honestidad en nuestros corazones,
Y sinceridad en nuestras acciones.
Ayúdanos a reconocerte en nuestro origen,
Como verdadera Madre de esta Nación,
Bajo tu manto, que es nuestra bandera.

(Esta reflexión se puede realizar  para toda la asamblea o separar en grupo para interiorizarla y compartir)

Queremos anunciar que María de Luján es nuestra Madre, que ella está con nosotros en el camino de la vida, nos cuida, nos guía y acompaña nuestro peregrinar.
Con confianza le pedimos a ella que nos enseñe a interiorizar la Palabra de Dios en nuestras vidas. (se puede dar las citas bíblicas a los distintos grupos, para compartir, y se les entrega unas tarjetitas en blanco o con la imagen de la Virgen, para escribir)

-“Se turbó, preguntándose que podría ser este saludo”. (Lc 1,29); prudentísima porque turbada calló, porque obedeció; porque creyó y supo entregarse como esclava de Dios.
¡Que modelo para nuestra locuacidad, nuestra poca fe y nuestro orgullo! “Las vírgenes prudentes llenaron sus lámparas de aceite” (Mt 25,4). María la llenó con fe. “Feliz porque has creído”. La llenó con amor. “Mi amado es mío y yo soy suya” (Cantar de los Cantares 2,16).La llenó de esperanza “Guardaba todas las palabras de Jesús en su corazón” (Lc 2,51).

(Después de compartir, escriben en la tarjeta una petición a la Virgen, mientras se canta, la dejan dentro de la carreta, que es el signo que la Virgen utilizó para quedarse con nosotros: “He elegido y santificado este lugar, para que en él permanezca mi nombre para siempre y estén fijos en él mis ojos y mi corazón”)

Santa María de Luján, madre del pueblo argentino, nos unimos a Ti para alabar la grandeza de Dios, con el Magnificat, (puede ser rezado o  cantado).
Luego con música de fondo, espontáneamente invitamos hacer resonancia del magnificat.

Oración final:
Oh Virgen de Luján
Que señalas el camino de nuestra peregrinación.
Haz que la prudencia de tu corazón la cultivemos también hoy,
Para que nuestras lámparas se aviven con una ardiente  fe y esperanza
Y el aceite del amor, como verdaderos templos de Dios. Amén

Canto final: A la Virgen de Luján